Vuelta a España

Gilbert se corona con una nueva victoria

Photo: courtesy
Michel Déjus

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Mosquera se deja un pedacito de Vuelta en Toledo

El gallego pierde 12 segundos respecto a Nibali al verse involucrado en un percance de carrera a 3 kilómetros de meta · Tiene que recuperar 50 segundos en la Bola del Mundo si quiere conseguir el sueño de una vida dedicada al ciclismo

Justo antes de la batalla final en la Bola del Mundo, Ezequiel Mosquera ha perdido 12 segundos respecto al líder Vincenzo Nibali en un final en el que el italiano se ha aprovechado de un final lleno de repechos en el que se ha impuesto el belga Gilbert.

En un final precioso, otro más, puesto por la organización en la ciudad de las tres culturas, Ezequiel, un currante del ciclismo que conoció la Vuelta a sus 32 años de edad, se ha alejado de su gran sueño.

La rueda de Frank Schleck dijo basta a menos de 3 km de meta, el luxemburgués no supo negociar la siguiente curva obstaculizando a un Mosquera que veía como el maillot rojo de Nibali se alejaba en la distancia. El gallego intentó recuperar posiciones, pero ya era demasiado tarde. El ciclismo no perdona y castigó al de Xacobeo con 12 segunditos.

Una nueva piedra en el camino para un Ezequiel que aspira a comerse el mundo. Precisamente, allí se jugará el trabajo de una vida, en la Bola del Mundo, un final en el que se encontrará piedras de las de verdad.

Escapadas inútiles
La etapa de hoy se presumía tranquila. 231, 2 kilómetros entre Piedrahita hasta Toledo pasando por templos del mundo de la bicicleta como el pueblo abulense de El Barraco. El único temor para los favoritos eran los siempre recurrentes abanicos, pero ni el viento apareció ni nadie intentó hacer daño de verdad.

Pronto se formó la fuga del día compuesta por cuatro corredores: Dominik Roels, Josep Jufre, Manuel Ocaña y Xavier Florencio. De nuevo, los equipos de los sprinters devoraron a los aventureros de la jornada, una costumbre constante en esta Vuelta.

Columbia encabezó la caza. Cavendish tenía delante un 'test mundial'. Largo kilometraje y un final con varios repechos asumibles para un hombre como él. Los Omega de Gilbert también se animaron a la fiesta y remataron la faena. Buena decisión.

El belga volvió a demostrar que tiene calidad a raudales en sus piernas. Fue el más fuerte en los últimos kilómetros, siguió la estela de un combativo y renacido Luis León Sánchez y no dejo opción alguna a los sprinters dándoles un serio aviso de lo que pueden encontrarse en Melbourne.

Inteligencia italiana
Un segundo después, Nibali llegaba a la línea de meta con el retrovisor puesto. Mosquera no estaba en el primer corte y el Tiburón ya afilaba sus colmillos. Ha pegado un mordisco en Toledo, pero en la Bola del Mundo le tocará evitar ser cazado por el pescador Mosquera


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